La japonesa y la campeona olímpica española brindan un gran partido, pero es la nipona la que se impone a la defensora del título
Subrayó Carolina Marín antes de partir hacia el Mundial de bádminton de Glasgow que allá iba a por el oro, el que sería su tercero consecutivo en un campeonato del Mundo. La preparación de la campeona olímpica en Río de Janeiro estaba incluso por encima de la cita de los Juegos de 2016. La propia jugadora lo aseguró, así como su entrenador Fernando Rivas lo suscribió. Pero ambos también fueron claros en su mensaje: Carolina llegaba al campeonato del Mundo en una forma óptima, pero también había que ver cómo habían progresado sus rivales. Y la japonesa Nozomi Okuhara demostró estar también a un nivel superior al bronce de Río. Se midieron éstas en cuartos de final y salió airosa la nipona, derrotando por 2-1 a la española.
Partido brillante, de cuajo, épico el que brindaron Marín, defensora del título de campeona del Mundo (2014 y 2015), y la volantista japonesa. La onubense, que arrolló a las rivales que se cruzaron en su camino en las dos primeras eliminatorias en las que entró en liza en Glasgow, se vio frenada de inicio por Okuhara, que defensivamente lo devolvía todo. En ese arranque se colocó ya 17-7. La española, competitiva siempre, no perdió la cara al set, pero el esfuerzo por remontar no pudo con el colchón logrado por la nipona (21-18).
En el segundo parcial hubo mayor igualdad y cada jugadora trató de imponer su patrón de juego. Mediado el set, con 12-10 para para la japonesa, Carolina Marín firmó un excelente parcial para dar la vuelta al marcador y apuntarse el segundo periodo por 14-21. Sacó la garra y el brillante bádminton la española.
Retos de peso para 2018
Carolina Marín estiró sus buenas sensaciones al comienzo del tercer set, si bien ambas jugadoras se ponían al límite en un duelo que bien podría haber sido la final de este Mundial de Glasgow. Impresionante y vibrante partido el que ofrecían una y otra que se fueron a un margen de no retorno de empate a catorce. Entonces, Okuhara aprovechó puntuales errores de las española y abrió el margen suficiente para defender la victoria con un 21-15 y el definitivo 2-1.
El balance de los partidos entre Carolina Marín y Nozomi Okuhara refleja un 3-6 para la japonesa. «Es una derrota dura de la que tendré que aprender», dijo Marín tras el encuentro de cuartos de final del campeonato del Mundo. La española, todavía con citas esta temporada, tendrá un 2018 de peso con el Europeo en Huelva y la posibilidad de volver a ser campeona del Mundo en Nanjing (China).