La velocista madrileña del Diputación Valencia Club de Atletismo también quiere seguir formando parte del relevo en la selección, con el que batió dos récords de España en el Europeo de Apeldoorn
ATLETISMO | ENTREVISTA
Notabilísimo ha sido la temporada de invierno de Daniela Fra en el atletismo español. La madrileña, integrante del Diputación Valencia Club de Atletismo y de la selección, ha desarrollado su explosión definitiva, colocándose quinta en el ranking nacional de todos los tiempos en los 400 metros en pista corta (51.64), a pesar de que su especialidad son las vallas. Este rendimiento, además, llevó a Fra, de 25 años, a ocupar una posición clave en los relevos de 4×400 metros de la selección española en el Europeo de Apeldoorn. Dos equipos, el femenino y el mixto, que saldaron su participación internacional con sendos cuartos puestos y dos récords de España (3:25.68 y 3:17.12). Pero Daniela, lejos de acomodarse, quiere seguir soñando en grande en la temporada de aire libre.
¿Qué confianza te dan los éxitos del invierno de cara al aire libre en tu prueba principal?
Es que realmente hacerlo bien en 400 vallas es ‘solo’ uno de mis dos grandes objetivos. El otro es seguir formando parte del relevo 4×400 de la selección española. Mi foco está en las vallas, quiero ir a los grandes campeonatos en la prueba individual, pero lo que he vivido en el Europeo de Apeldoorn con el relevo me ha encantado. Ser un equipo es otro rollo. En Roma el año pasado corrí las vallas y fue increíble, me lo pasé muy bien, pero es verdad que cuando vas con los relevos es como tener un lugar seguro dentro del campeonato, algo muy cómodo y agradable.
¿Lo veis también como una posibilidad más grande de lograr una medalla o un puesto de finalista en un gran campeonato?
Es que estamos todas tan bien que podemos soñar con hacer algo grande de verdad. Y yo no me quiero ir de aquí… así que habrá que correr rápido.
En Apeldoorn, a pesar de terminar cuartas, lograsteis de hecho la novena marca mundial de la historia (la sexta de una selección nacional).
Claro, es que al terminar tú te quedas con la cosa de haber sido cuartas, todas queríamos haber subido al podio… pero no caímos en que lo que habíamos logrado era brutal. ¡Es que el anterior récord de los Campeonatos de Europa era solo dos centésimas más rápido que nuestra marca! Habríamos ganado cualquier Europeo en la historia menos los de 2023 y 2025. Es un pasada y ojalá podamos seguir mejorando esto, que estoy convencida de que sí porque somos muchas para muy pocos puestos, va a ser muy jodido entrar en el equipo, y eso también va a hacer crecer la prueba.
Además de 400 vallas, ?te veremos en algún 400 lisos este verano?
Sí, sí. Yo he expresado a Pepe Peiró y al cuerpo técnico de la Federación mi deseo de seguir formando parte del equipo de 4×400 y, por tanto, habrá que correr 400. Además, lo haré encantada porque me divierte mucho no hacer una sola prueba, es muy estimulante para mí.

¿Los 51.64 en pista cubierta te dan licencia para soñar al aire libre?
Este verano espero correr mucho, lo que he conseguido este invierno me da mucha confianza. No en la primera competición, pero como principal objetivo sí que quiero bajar de 55 segundos en 400 vallas.
¿Tienes en mente el récord de España (54.34 de Sara Gallego)?
Me alegra que seas tú quien me lo pregunte porque a mí me cuesta mucho verbalizarlo, decir que quiero intentar batir el récord de España. Pero hablando con mi entrenadora Ángeles Guerra hemos llegado a la conclusión de que si seguimos trabajando así podemos conseguirlo, es un objetivo real. Tampoco me quiero subir a la parra ni obsesionarme, tenemos el foco en correr rápido y no ‘petar’ mucho al final, y es cierto que con lo logrado en pista cubierta puede que sea más fácil conseguirlo. Vamos poquito a poco y, aunque el récord de España está ahí, todavía no podemos decir que vamos a por ello a tope, antes hay que bajar de 55 segundos.
Por unas cosas y otras, todavía no has podido enfrentarte a Sara Gallego estando ambas en vuestra plenitud física, pero parece que este verano por fin llegará el esperado duelo. ¿Tienes ganas de medirte a ella?
Sinceramente, tengo muchas ganas de que ella regrese a su mejor nivel. Luego a lo mejor empieza a ganarme y me da rabia, pero de verdad que quiero que ella corra mucho, porque es muy buena y se lo merece, y además le va a venir muy bien al 400 vallas español. No solo con este duelo, sino con Carla García, que también está ahí. La competitividad siempre es buena, así que no puedo no desear que Sara esté cuanto antes de vuelta a tope.
Al margen de marcas, ¿cuáles son tus objetivos para el aire libre?
Empiezan en mayo con los World Relays de Guangzhou, una competición que a principios de año ni siquiera tenía en mente y que ahora es clave. A partir ahí, el Campeonato de Europa por Equipos, que se celebra del 27 al 29 de junio en Madrid y me haría muchísima ilusión competir en el 400 vallas y hacerlo bien, y el Mundial de Tokio en septiembre, donde ojalá esté en la prueba individual y con los relevos.

¿Cómo de especial sería para ti defender los colores de la selección en tu ‘casa’, en Madrid?
Ya en el Campeonato de España me sentí superapoyada y muy animada, y en el Europeo por Equipos imagino que será más todavía. En Apeldoorn vimos cómo el público neerlandés estaba a tope animando a su selección y en Madrid la afición española no va a ser menos. Me encanta competir con el calor del público, me hace sonreír y competir mucho más feliz cuando veo que la gente anima.
Pase lo que pase al aire libre, 2025 ya ha sido el año de tu vida a nivel deportivo. ¿Consideras que ha cambiado algo respecto a otras temporadas?
Este año he dado el paso de la nutrición. El año pasado contraté los servicios de la agencia de representación Personal Best para que me ayudaran a conseguir competiciones, contactar con marcas, moverme más en el mundo del atletismo profesional, pero no di el paso de la nutrición porque consideraba que no me hacía falta, que me alimentaba bien. Y me alimentaba bien, pero me he dado cuenta este año, que sí trabajo con una médico, Cristina Jordán, que aguanto mejor los entrenamientos gracias a ella. He notado muchísimo las mejoras con los consejos y pautas que me da. Y en el crono se está viendo, que he mejorado un segundo y medio mi marca en 400.
¿Esperabas estar en estas marcas esta temporada?
¡No! Este año estaba apostando por la nutrición, pero como yo pensaba que comía perfectamente no creía que la diferencia fuera a ser tan brutal. Sí que en los entrenamientos había notado que los aguantaba mucho mejor, sobre todo entrenamientos en los que el año pasado algunos compañeros me reventaban y este terminaba más cerca de ellos. Esto sí que me daba alguna pista de que yo estaba mejor, pero no me esperaba hacer marcas así ni correr con gente tan top.
A nivel entrenamiento, ¿has cambiado algo en la planificación con tu entrenadora?
Ahora que lo dices, en realidad ha habido bastantes cambios. En Arroyomolinos nos hemos quedado sin pista este año porque la están arreglando y lleva ocho meses cerrada, entonces hemos hecho toda la pretemporada en el campo. Hasta diciembre, que reabrieron Gallur y también fuimos puntualmente a Alcorcón y Navalcarnero, todo lo hicimos en el campo. Los martes comprábamos nuestra entrada para ir a Gallur y el resto de días nos apañábamos con lo que tenemos en Arroyomolinos, que por suerte es una ciudad que tiene mucha naturaleza, caminos de arena, cuestas… Cosas que podemos usar en nuestros entrenamientos.
¿Crees que ese tipo de entrenamientos, más de fuerza y no tan específicos de pista, te han podido ayudar a alcanzar este estado de forma?
Totalmente. A mí me cuesta mucho, por ejemplo, hacer entrenamientos de series muy largas, de hasta 1000 metros, y hacerlos en el campo es una maravilla. En la pista se me hacen el doble de largos. Diría que es posible que el año que viene apliquemos algunos entrenamientos de pretemporada en el campo a pesar de que para entonces ya tengamos la pista de Arroyomolinos, ya que he notado que esta temporada he logrado terminar las carreras con más fuerza.
