Derrotada Ucrania en cuartos de final y con el pase a semifinales del campeonato de Europa por equipos de bádminton en la mano, España ya había hecho historia en categoría femenina. Nunca antes se había entrado en el medallero continental. El potencial del combinado formado por Carolina Marín, Beatriz Corrales, Clara Azurmendi, Sara Peñalver y Haideé Ojeda no tenía ya límites para optar por el oro, sabiendo que ese gran paso de estar entre los países que se ganan el metal se había dado. A la postre, un bronce para la selección femenina en el torneo de Kazan (Rusia), donde lo logrado, además, asegura la presencia en el próximo Mundial por equipos femenino, que se disputará del próximo 15 al 22 de mayo en Kunshan (China).
España se jugó el pase a la final ante Bulgaria. Una revancha. El único país que había logrado tumbar a la selección de Ernesto García en este Europeo. Lo logró en la jornada inicial. Luego, España avanzó con firmeza. Pero este sábado se volvía a medir a las búlgaras. Con solvencia comenzó España, que llegó a colocarse con un global de 2-0, pero a la postre Bulgaria consiguió anotarse el punto definitivo de la remontada (2-3) en el último, trabajado e intenso doble.
Abrió fuego la vigente campeona del mundo individual. Carolina Marín se enfrentó a Linda Zechiri. Algo más trabajado el primer set, lo levantó a su favor la onubense por 21-17, para luego arrollar a su oponente con un rotundo 21-9. Llegaba el primer punto para la selección. Y tomó el testigo Beatriz Corrales, quien se midió Petya Nedelcheva. La madrileña tenía la oportunidad de revancha, pues la búlgara le derrotó en el partido entre éstas en la primera jornada de la fase de grupos. Y Corrales no dudó en pista. Cerró un 21-13 y un 21-11 para colocar el segundo punto para los intereses del combinado nacional.
Un punto más y se clasificaba para la final del europeo. Bulgaria jugó su tercer partido con Stefani Stoeva. Feroz en su juego, la jugadora búlgara acabó derrotando a Clara Azurmendi sin que la oposición de ésta le supusiera un problema para restar al marcador global con un marcador de 17-21 y 11-21.
Excelente trabajo de la selección con un bronce y su billete para el Mundial por equipos
El escenario pasaba a los dobles. Y en esta modalidad Bulgaria posee mayor experiencia. Presumible ventaja para éstas, aunque la pareja formada por Sara Peñalver y Haideé Ojeda cerca estuvo de levantar el primer set ante Gabriella Stoeva y Petya Nedelcheva. Las españolas ajustaron a un 19-17, pero sus rivales se esmeraron en la reacción para endosar cuatro puntos consecutivos y ganar 19-21. La siguiente manga fue más cómoda para las búlgaras (11-21), empatando a dos.
Y de nuevo otro duelo que se reeditaba respecto a la jornada inicial: Marín-Corrales frente a Stoeva-Zechiri. Incontestables las búlgaras en el primer set ganaron 10-21. Pero las españolas replicaron en la siguiente manga por 21-17. Se exprimía al máximo la semifinal entre España y Bulgaria. Al tercer set del quinto partido. Igualdad máxima hasta el momento álgido del 18 iguales. España arreó y anotó dos puntos más, teniendo puntos de partido. Pero la reacción de Bulgaria fue definitiva para el 20-22 del set y el 2-3 del global. «Orgullosa de esa afición y de todos vosotros que nos habéis apoyado. Hemos estado a un paso, pero España volverá», decía Carolina Marín tras la eliminación en una de sus redes sociales. Excelente trabajo de la selección nacional con un bronce y su billete para el próximo Mundial por equipos.