Presentan el libro retrospectivo sobre los Juegos Olímpicos de 1992, escrito por EFE y editado por LID
‘Barcelona 92: 25 años del gran cambio del deporte español’, escrito por la redacción de Deportes de la Agencia EFE y publicado por LID Editoril, fue presentado este jueves en un acto encabezado por el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Ramón Lete, que estuvo acompañado por el delegado de la Generalitat de Cataluña en Madrid, Ferrán Mascarell; la presidenta de la Federación Internacional de Triatlón y miembro del COI, Marisol Casado; el arquero Antonio Rebollo, autor del encendido del pebetero olímpico; y los medallistas olímpicos Theresa Zabell, Mercedes Coghen, Fermín Cacho y Roberto Solozábal.
Lete afirmó sobre el trabajo realizado que es «un libro tan inspirador como necesario para que la sociedad conozca el legado de aquella cita inolvidable», al tiempo que significó el poso de los Juegos de Barcelona, primeros y únicos organizados en España, que «supusieron un punto de inflexión, no sólo para nuestro deporte, sino también para nuestra sociedad, nuestra economía y para la forma en la que el mundo entendía un acontecimiento de esta envergadura».
Y el presidente del CSD recordó dos circunstancias clave para la historia del deporte olímpico español, pues con la cita de 1992 llegaron las primeras medallas femeninas españolas, además de que la celebración de los Juegos suscitó la creación del plan de Ayuda al Deporte Olímpico (ADO) que «construyó su rotundo éxito sobre una fórmula de colaboración público-privada que todavía se sigue mostrando como una combinación esencial para nosotros».
«Barcelona 92 debe ser el espejo en el que mirarnos para seguir avanzando hacia un nuevo salto cualitativo en nuestro deporte. Aquella celebración nos demostró todo lo que somos capaces de conseguir cuando la sociedad y los representantes políticos reman en una misma dirección», concluyó.
Mascarell, por su parte, refrendó la importancia de los Juegos Olímpicos: «La inauguración fue un día muy especial porque había mucho trabajo detrás desde que en el 1981 Juan Antonio Samaranch arrancó este proyecto. Todos celebramos la nominación con la convicción de que estaba sucediendo algo muy importante para Barcelona, Cataluña y España, y así fue».