TAEKWONDO | JUEGOS OLÍMPICOS DE PARÍS 2024
Por RAÚL COSÍN (ENVIADO ESPECIAL A PARÍS).- Adriana Cerezo, que fuera subcampeona olímpica en -49 kilos en los Juegos de Tokio, debutó la uruguaya María Sara Grippoli en los Juegos Olímpicos de París 2024. La española, con un el número dos del ránking, y la sudamericana, con el puesto 17, se midieron en el Grand Palais. La de Alcalá de Henares venía anunciando que su objetivo estaba en volver a ser finalista olímpica y, en esta ocasión, adjudicar el oro. Por lo pronto, ovación con la presentación de la española. Y victoria 2-0 ante la uruguaya para meterse cuartos de final, doonde se enfrentará a la iraní Mobina Nematzadeh.
Adriana, con la protección roja, arrancó fuerte, implacable, el primer round y en pocos segundos ya había marcado 0-5. Un kick en la cabeza dio el 1-8 a la madrikeña. Pese a la diferencia que trató de imponer la española, la uruguaya, de 17 años, no se amilanó. Cerezo lo cerró 4-11. Adriana, tenía la misma edad que Grippoli cuando en Tokio se hizo con la plata. Arrancó el segundo round con otro kick en la cabeza. Siguió marcando y volvió a abrir una brecha de 0-6. Lo cerró con un punto más (0-7). Y resolvió el combate, el primer del día en el camino a la medalla por 2-0. Pase a cuartos de final.
«El recibimiento ha sido una barbaridad. Es jugar en casa. Había que disfrutarlo», explicó la taekwondista tras imponerse a su primera rival. Al respecto dijo, que «a cada rival ha y que tomársela muy en serio si se quiere llegar a una final. Hemos salido a hacer nuestro trabajo. He intentado ir haciendo todo lo que me iba diciendo Jesús desde atrás. Iremos ajustando cosas que nos pueden hacer falta para los próximos combates. Y a disfrutar».
La madrileña también hizo referencia a la familia y amigos que habían viajado desde España para verla competir en los Juegos de París: «Están mis padres, está mi abuela, están mis tíos y mis primas, amigos y padres de mis amigos, ha venido gente de España que no conozco y siento su apoyo y lo agradezco mucho. Es una locura. Creo que ni en Navidades veo a tanta gente junta».
«Me he levantado que parecía un tomate con dos puñaladas. A las 6:30 de la mañana ha sonado la alarma, los ojos hinchados,… He venido prontito porque teníamos que estar para el random y estoy fresca como una rosa», comentó sobre cómo había despertado en el día que luchaba de nuevo por una medalla olímpica.