TENIS | ENTREVISTA
Pablo Herrera/EFE (Las Palmas de Gran Canaria).- Una de las nuevas grandes promesas del tenis español es grancanaria y se llama Kaitlin Quevedo. Con 19 años, ya se encuentra en el puesto 145 del ránking profesional WTA y su meta para 2026 es asaltar el top 100, un reto que está segura de conseguir trabajando como lo está haciendo, puesto que tiene «muy claro» que puede «competir contra todas».
En una entrevista con EFE, la joven tenista -quinta mejor del país- desvela que su próxima temporada arrancará en el clasificatorio del Abierto de Australia y con la disputa previa del torneo WTA 500 de Brisbane, un arranque «fuerte» que servirá de punto de partida para un año en el que la idea es jugar torneos de «más nivel» y acostumbrarse a la máxima exigencia del circuito.
«Quiero competir con las mejores, contra jugadoras que te exigen mucho y acostumbrarnos a ese nivel. Tengo muy claro que puedo competir con todas. Sí es verdad que tengo puntos que defender, pero en torneos más grandes ganas más puntos por cada ronda y se compensa», asegura.
Más allá de entrar al top 100 y competir con las mejores tenistas del mundo, Quevedo se pone de reto acceder a los cuadros principales de los Grand Slams, pasar rondas en los WTA 250 y 500 y luchar por sumar un WTA 125 a su palmarés durante un 2026 que apunta al año de su eclosión definitiva en el panorama tenístico.
Una explosión que no se entendería sin el crecimiento y la evolución profesional de Kaitlin Quevedo durante un 2025 frenético -«no hemos parado ni una semana»-, con un saldo de 26 torneos y el objetivo cumplido de asomar en el top 200 del ránking WTA.
«Hemos jugado, entrenado y trabajado muchísimo. Siempre lo piensas y tienes mucha ilusión y al final cuando lo consigues te sientes muy bien y orgullosa del trabajo hecho. Tengo muchas ganas y hambre de seguir», valora la grancanaria.
Y entre tantas sonrisas, Quevedo tiene marcada la alegría de haber levantado el trofeo en el ITF W100 Gran Canaria-Maspalomas ante los ojos de su familia y con el calor del público durante toda la semana: «Nunca había sentido esas emociones. Espero vivir otra semana así, pero será difícil».
La canaria no esconde su ilusión de disputar la Billie Jean King Cup con la selección española y cumplir su sueño de «estar con las mejores» en el combinado dirigido por su paisana Carla Suárez.
«Espero que el año que viene Carla Suárez me llame y me diga de jugar en la selección española. No he hablado mucho con ella, pero el otro día me escribió para preguntarme por la temporada y desearme suerte en el siguiente torneo. A ver si el año que viene voy mejorando más y ahí sí que me va a llamar», anhela.
Con el sueño en la retina de ganar «todos los Grand Slam que pueda» y convertirse en número 1 del mundo, la joven tenista no deja de lado sus estudios de dietética ni sus ganas de alcanzar un cierto estatus para «alzar la voz para concienciar a la gente de las cosas que pasan en el mundo».
«No todo es solo tenis, sino que quiero ayudar de alguna manera y hacer ver, por ejemplo, el impacto de la pobreza. Hay niños que mueren cada día, personas que pasan mucha hambre… Es muy triste y no es justo», afirma al ser preguntada por sus sueños de carrera profesional.
Para esta promesa del tenis español, su formación en Estados Unidos, donde llegó a ser campeona nacional en tierra para menores de 16 años, «ha sido una buena oportunidad para crecer tenísticamente” antes de continuar su desarrollo en las instalaciones del TEC Carles Ferrer Salat de Barcelona.
Preguntada por su referente en el tenis no duda un instante e incluso responde antes de que la cuestión termine: «El primero es Rafa Nadal, sin duda». Aun así, no quiere dejarse en el tintero el nombre de la estadounidense Serena Williams, ganadora de 23 Grand Slams en su carrera.
«Rafa Nadal siempre ha sido un modelo para mi hermana y para mí. Siempre que jugaba estábamos con mi padre para verlo. Es un gran ejemplo y un tenista increíble con una gran mentalidad. Espero hablar algún día con él y preguntarle cosas», asegura con una sonrisa.










