Vall d’Alba, Oropesa del Mar, Culla, Castellón de la Plana y Benicássim, escenarios duales de interior y costa para el certamen
Los próximos campeonato de España de ciclismo en carretera se desarrollarán en la provincia de Castellón entre los días 22 y 24 de junio. La Real Federación Española de Ciclismo (RFEC) y la Diputación de Castellón presentaron las cinco sedes para la organización de un certamen que reflejará la dualidad entre la costa y el interior con Vall d’Alba, Oropesa del Mar, Culla, Castellón de la Plana y Benicássim.
El campeonato de España arrancará el viernes 22 de junio con una contrarreloj individual con salida y meta en Vall d’Alba. Por la mañana se disputará la prueba de sub’23 y la femenina con un recorrido de 20 kilómetros y por la tarde la prueba para profesionales con un recorrido de 38 kilómetros.
El sábado 23 se celebrará el recorrido en línea para sub’23 y féminas con salida en Oropesa del Mar y llegada en Culla, donde se habilitará un circuito de montaña en el que los sub’23 realizarán tres vueltas, sumando un total de 160 kilómetros, y las féminas dos vueltas, sumando un total de 120 kilómetros.
Y, por último, el domingo 24 se disputará la etapa reina con un recorrido en línea para el pelotón profesional con salida en Castellón de la Plana y meta en Benicàssim, pasando por el sur de la provincia y por otros parajes únicos como la Serra d’Espadà. Como novedad, y en favor de un gran espectáculo, la etapa acabará con tres subidas al Desierto de Las Palmas, sumando un total de 210 kilómetros.
Escenario para el ciclismo
«Castellón tiene un gran atractivo para el ciclismo, con buena climatología, zonas de montaña, zonas planas y un binomio con el ciclista con un gran potencial a desarrollar, pues tratáis bien al ciclista y eso es muy apreciado entre todos los aficionados», explicó el presidente de la RFEC, José Luis López Cerrón.
«Hemos diseñado las ubicaciones pensando en el aspecto deportivo, pero también dispuestos a exponer la variedad de paisajes y patrimonio que ofrece nuestra provincia. Con ello, Castellón será el escenario de las mejores competiciones deportivas y también el deporte se convertirá en el mejor escaparate de los mejores valores de nuestra tierra. En definitiva, exportaremos a través del ciclismo lo que convierte a Castellón en el mejor escenario deportivo del Mediterráneo», subrayó Javier Moliner, presidente de la Diputación de Castellón.
Se prevé un impacto económico superior a los 500.000 euros, generando retorno en establecimientos hoteleros con la presencia de participantes, staff técnicos y organización. El consumo medio de los ciclistas (400 ciclistas), staff (100 técnicos y personal de staff) y familiares (600 familiares de ciclistas) supera los 150 euros diarios y el del público asistente y visitante (6.000 aficionados) los 40.