La toledana se mostró feliz con el trabajo realizado y al experiencia vivida, en unos Juegos disfrutados, en los que hizo mejor marca personal y quedó a un segundo del récord de España de siempre
ATLETISMO | JUEGOS OLÍMPICOS DE PARÍS 2024
Por RAÚL COSÍN (ENVIADO ESPECIAL A PARÍS).- Winfred Yavi paseó la bandera de Burundi corriendo, a saltos, gritando de extrema alegría recorriendo toda la pista del estadio olímpico de los Juegos Olímpicos de París 2024 (el Stade de France). Acabó con un sprint para rematar la carrera de los 3.000 obstáculos y proclamarse campeona olímpica con un tiempo de 8:52.76. Yavi pasó por la meta y no paró de correr, gritaba, estaba sanamente enloquecida, y le correspondió tocar la campana porque había fijado el nuevo récord olímpico de la distancia (estaba en manos de la rusa Gulanrá Samítova-Gálkina: 8:58.81, Pekín 2008). Una carrera rapidísima, en la que la española Irene Sánchez-Escribano defendió una gran competición, quedando undécima, registrando un tiempo 9:10.43, que era su mejor marca personal y se quedaba a un solo segundo del récord de España de siempre.
La toledana disfrutó la carrera. De hecho, se convirtió en la mejor obstaculista olímpica española de la historia. Atrás, muy atrás, ya como un mal sueño, quedó aquella lesión que le rompió de tristeza a poco de marchar a competir en los Juegos de Tokio (una fractura en el segundo metatarsiano del pie izquierdo, a dos semanas de viajar a la cita asiática). La atleta acabó en Saint Denis tras completar un 3.000 obstáculos notable. Lo dicho, lo disfrutó, al tiempo que lo sufrió. Porque la carrera se puso dura y rápida desde el principio, con toda una lucha en cada ría, con el público apretando más y más hasta afrontar los últimos 400 metros; ensordecedor. Irene, entrenada por Antonio Serrano, era la cuarta española en entrar a una final olímpica de la modalidad. Antes estuvieron Zulema Fuentes-Pila (11ª, 9:35.16) y Marta Domínguez (abandono) en Pekín 2008 y su compañera Carolina Robles -apeada en primera ronda el domingo- en Tokio 2021 (14ª, 9:50.96).
Ya había presentado sus credenciales la toledana en la clasificación. Avanzó. Y llegó el día. Y en la lista de salida figuras como Beatrice Chepkoech (Kenia, 8:44.32); la campeona olímpica, Peruth Chemutai (Uganda, 8:55.09, mejor marquista de 2024); la mundial, Winfred Mutile Yavi (Baréin, 8:50.66); la europea, Alice Finot (Francia, 9:05.01). Además, entraron en liza Norah Jeruto (Kazajistán, 8:53.02) y Faith Cherotich (Kenia, 8:59.65).
Con el pistoletazo de salida este martes en Saint Denis, sobre la pista violeta, Chepkoech salió metió una marcha potente y puso al grupo en fila desde el primer giro. Irene atrás, a su ritmo, sabiendo que la única estrategia posible era contemporizar y empezar a pasar cuando la gente pagase sus excesos. Pasó el 1000 en 2:55.1 (Irene 2:58.9). El 2000, con Chemutai relevando, se marcó en 5:57.6 (Irene 6:05.9). Iba rozando el top 10 la nuestra, en progresión. El último kilómetro fue tremendo, con Yavi mano a mano en un sprint salvaje frente a Chemutai (acabaría imponiéndose la primera con récord olímpico, 8:52.76) e Irene erigiéndose en la mejor obstaculista olímpica española de siempre, 11ª con 9:10.43, acariciando el récord de España de Marta Domínguez (9:09.39).
Marta Pérez, clasificada para semifinales en 1500 m
La soriana Marta Pérez concluyó en sexta posición su serie de los 1500 m, clasificándose directamente para las semifinales, mientras que la segoviana Águeda Marqués y la catalana Esther Guerrero tendrán que pasar por la repesca al concluir novena y décima, respectivamente. Marta paró el crono en 4:04.94, Águeda en 4:01.60, consiguiendo su mejor marca persona, y Esther en 4:06.60. La repesca se disputará este miércoles, 7 de agosto, y las semifinales, el jueves, 8 de agosto.
No habrá españolas en longitud
Las atletas españolas Fátima Diame y Tessy Ebosele no pudieron meterse entre las doce mejores que accedían a la final de salto de longitud. Con un salto de 6.52, Fátima concluyó la ronda clasificatoria en decimoquinta posición, mientras que el intento más largo de Tessy fue 6.09, una marca que le situaba en trigésima posición.
«La clasificación ha sido un poco dura, el primer salto me he quedado muy lejos de la tabla. El segundo de ajustado, pero me ha faltado batir y el último metido nulo, que con eso sí que hubiera conseguido pasar. Pero bueno, así que son las calificaciones», defendió Diame.
«Siempre lo he dicho, son duras. No me voy contenta, claramente porque venía con el objetivo de estar en esa final, pero bueno, ha sido un mes muy duro desde Roma, así que no me puedo fustigar y ahora hablaré con Iván (Pedroso, su entrenador) a ver qué me dice», señaló la valenciana.