La campeona olímpica de salto de altura gana en Zurich y resuelve su segundo triunfo global en una Diamond League
Ruth Beitia remató en Zurich los detalles de un diamante que ya dejó pulido en París el pasado fin de semana. Este jueves, la campeona olímpica cántabra revalidó el título de la Diamond League en salto de altura. El segundo consecutivo.
Sólo la santalucense Levern Spencer podía apurar a la española en esa búsqueda de la consecución del circuito diamante, pero quedó eliminada cuando el listón se fijó en el 1,93 metros. Significó esto que sin finalizar el concurso Beitia revalidaba la Liga Diamante en su especialidad.
De nuevo brilló en su concurso la santanderina. Se fue directamente al 1,86 y superó luego el 1,90, el 1,93 y el 1,96 con una prueba inmaculada. Lo dicho, Spencer resbalón en el 1,93 y ahí Beitia ya se sabía ganadora por segunda temporada consecutiva de la Diamond League. Atrás dejó también a la estadounidense Inika McPherson, la sueca Sophie Skoog, la polaca Kamila Licwinko y a la búlgara Mirela Demireva, que acabó en Río de Janeiro como subcampeona olímpica. Todas en 1,93.
La saltadora española, ya sola en competición, buscó igualar su récord de España de 2,02, pero no lo logró. El próximo 9 de septiembre, en la reunión de la Diamond de Bruselas, recogerá su diamante. El segundo consecutivo en altura. Sólo Blanka Vlasic lo había conseguido antes. (Pinche aquí para ver los resultados completos de la prueba de Zurich)
Beitia, de 37 años, completa una temporada soberbia con la conquista el campeonato de Europa al aire libre —tercero consecutivo para ella—, luego viajó a Río de Janeiro para proclamarse campeona olímpica, y finalmente ha suscrito su segundo triunfo global en la Diamond League.
La saltadora, dirigida por Ramón Torralbo, se apuntó en esta afamada y reconocida liga mundial las victorias en Oslo, Estocolmo, Londres, París y Zurich, además de un sexto en Eugene y una suma de 41 puntos por los 25 que tenía Spencer, a la que sólo le valía ganar. A la cita helvética en el estadio Letzigrund, Ruth acudía sabiendo que un quinto lugar le era suficiente, pero Beitia escribió un concurso limpio como ya hizo en el Europeo y los Juegos.