El reto de Carolina Marín de repetir oro en los campeonatos de Europa de bádminton está visto para sentencia. La onubense disputará la gran final por el cetro continental ante la escocesa Kisty Gilmour, este domingo (TDP —15.00 horas—), tras derrotar en semifinales a la danesa Line Kjaersfeldt.
La semifinal se presentaba con una Carolina Marín favorita ante una Line Kjaersfeldt que va creciendo poco a poco a nivel internacional y es la auténtica referencia del bádminton danés en la actualidad. Los técnicos de la Federación Española de Bádminton siempre han valorado la complejidad de una rival al alza como Kjaersfeldt, y, en esta ocasión, no defraudó las expectativas.
El partido en el primer set se desarrolló con gran igualdad entre ambas jugadoras, rompiendo la dinámica Marín cuando abría distancias en el 15-10. En ese momento, se unieron varios condicionantes para que, tras una llamada a la asistencia médica por parte de la española, la danesa se pusiera por delante 17-18. Ante una situación adversa, Marín volvió a sacar por enésima vez su carácter ganador para reconducir la situación y doblegar la resistencia de Kjaersfelt a la tercera opción de set que tuvo con un 23-21. La segunda manga contó con ventajas más amplias para la española desde el principio; ventajas que se mantuvieron estables y que Carolina supo encauzar en busca de la victoria definitiva que certificó por 21-15.
La rival en la final será la escocesa Kisty Gilmour, verdugo de Beatriz Corrales, que derrotó este sábado en la semifinal a la actual subcampeona de Europa, la danesa Anna Thea Madsen por 17-21 21-18 21-19. El duelo entre Carolina Marín y Kirsty Gilmour será el pulso entre las dos mejores jugadoras europeas, teniendo un balance entre ellas de 4-1 favorable a una Marín, que ha contado por victorias todos sus enfrentamientos excepto el último, el que disputaron en la final del Internacional de España 2014.