Victoria del conjunto donostiarra ante las valencianas por 2-1 en un partido en el que los goles se concentraron en el primer tiempo
Siendo la Real Sociedad uno de los cinco equipos que menos goles reciben de la Liga Iberdrola de fútbol femenino, debía afinar algo más en ataque ante el Levante, que visitó Zubieta, para conseguir el triunfo. Cuestión de equilibrio. Ese que por lo general, en tanto que las donostiarras minimizan los tantos encajados, contienen las realistas, pero que al ser tan bajo el balance goleador le aleja de los puestos de arriba. Pero estiró ese equilibrio y logró meterse los tres puntos en el zurrón con su victoria ante un conjunto valenciano cuyos intentos en el segundo acto no tuvieron merecido premio.
Las dianas se concentraron en el primer acto. Nahikari adelantó a las locales, pero Mendoza, en propia puerta, devolvió una igualdad que se volvió a romper también en propia meta cuando Sonia Prim metió el balón en la suya para un 2-1 que acabaría siendo definitivo a la postre. No faltaron las ocasiones tras el descanso, pero sí el acierto. En ese momento, la Real se defendió y probó a la contra. Mientras el Levante se definió a través de eso del equilibrio que personalizó Maitane logrando que su equipo siempre se mantuviese como un bloque y generando además en la construcción. La buena noticia levantinista, en todo caso, fue el regreso de Adriana Martín tras once meses de lesión.
Arrancó el partido alborotado. Sin control, ni precisión. El balón no lo acabó de sostener ninguno de los equipos. Y de pronto, entre ese juego roto, progresó Manu Lareo con el balón hacia el centro de la media luna del área del Levante, cedió el esférico a Nahikari y ésta sacó un chut seco y cruzado desde fuera del área alojando el balón a la derecha de la portera Sandra Torres. Tempranero tanto que recibía el conjunto de Andrés Tudela, que de dieciséis partidos ligueros disputados hasta la fecha ha encajado en trece.
Persistió un fútbol totalmente alejado de las pizarras. Sin superioridades claras de unas sobre otras. Sin precisión. Y en las idas y venidas, de más gusto para el espectador neutral, siempre con intensidad en las jugadoras, llegó de forma casi aislada la acción del empate de las azulgranas. Nagore buscó el centro desde la izquierda y Mendoza, en un intento por despejar el balón, marcó en su propia portería. Poco después el Levante pudo dar la vuelta al marcador. Guti botó una falta de lejos y el balón lo remató de cabeza Maitane, elevándose ante el resto de jugadoras, yéndose el balón cerca del palo derecho de Mariasun.
Con el paso de los minutos, aunque con un mismo guión en el que ningún equipo se erigía protagonista, la Real sociedad procuró mostrarse más equilibrado. Solvente en defensa, dejando en nada las insustanciales acciones de Charlyn Corral y Marijose, y pisando algo más el área rival. Pasada la media hora de partido, Cirauqui luchó por un balón por la derecha y centró hacia el segundo palo. El balón fue pasado y recogió Manu Lareo, quien en su centro raso encontró la asociación de Sonia Prim, que marcó en propia meta (2-1). Sin mucho por destacar en adelante, se llegó al descanso.
La labor de Maitane y el retorno de Adriana
Reanudó el Levante con ímpetu el partido. La vocación debía ser ofensiva en busca del empate. Y en los primeros compases del segundo acto, Corral probó hasta en tres ocasiones encontrando en dos a Mariasun y en una el balón se fue fuera. El trabajo de las valencianas les procuró más posesión. Y en eso, Maitane López fue fundamental. Hizo siempre bien su papel clave por mantener las líneas juntas de su equipo, evitando que se resquebrajase. Y sumó, cuando la opción de los balones largos a Marijose y Charlyn se vio que no daba rendimientos, en la labor de la construcción.
Si bien el Levante presentó mejor cara en el segundo tiempo, la Real, con la ventaja mínima en el marcador, supo en todo caso hacer buena lectura de qué podía hacer según los elementos con los que contaba. Bajo la lluvia, las donostiarras defendieron bien y salieron a la contra provocando apuros sobre la meta de Torres. Y las levantinistas, lógicamente, seguían a lo suyo, encontrando o provocando, además, alguna grieta para tener opciones. Una acción asociativa en ataque dio con un centro de Nerea, quien le dio un toque muy incisivo por la derecha a las visitantes, que acabó rematando Charlyn después del rechace de Mariasun, pero el balón se fue al larguero.
La Real no perdió la seriedad. Y el Levante tampoco las ganas y la perseverancia por lograr un empate que se fue mereciendo, aunque siempre hubo de tener cuidado con las contras locales. Y salió, a falta de veinte minutos, Adriana Martín. La noticia más destacable seguramente. El retorno de una de las mejores de la competición tras once meses de lesión, desde el partido de la segunda vuelta de la pasada campaña ante el Barcelona. La aragonesa, un excelente ‘fichaje’ para lo que resta de curso, le dio criterio al juego ofensivo levantinista, uniéndose a la labor de Maitane y la velocidad de Nerea. Sin embargo, la Real aguantó la ventaja para acabar ganando 2-1.
Ficha técnica:
Real Sociedad: Mariasun; Nuria Sánchez, Mendoza, Soldevila, Gaste; Cirauqui (Baños, m.82), Itxaso, Chini, Manu Lareo (Leyre, m.69); Naiara Beristain (Eizaguirre, m.61); y Nahikari (Aintzane, m.90).
Levante UD: Sandra Torres; Guti, Sonia Prim, Mariajo (infante, m.90); Lucía, Maitane, Carol Marín (Adriana, m.70), Nagore, Alba Merino (Nerea, m.61); Marijose y Charlyn Corral.
Goles: 1-0, min.3: Nahikari. 1-1, min.13: Mendoza (p.p.). 2-1, min. 34: Sonia Prim (p.p.).
Árbitro: Recio Moreno (Comité navarro). Sin amonestaciones.
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