Marta Sanz se impone en el cuadro individual y ésta junto a Natalia Escuriola y Patricia Sanz también por equipos femenino
El golf aportó este jueves cuatro oros al medallero español en los Juegos Mediterráneos Tarragona 2018. Dominando de principio a fin en las cuatro categorías en juego, individual y por equipos masculino y femenino, los representantes españoles brillaron con fuerte intensidad a lo largo de toda la competición, poniendo de manifiesto la calidad de su juego.
Marta Sanz y Mario Galiano acabaron con la medalla de oro al cuello en el torneo individual mediante vías bien distintas. Sanz mediante un esforzado trabajo para doblegar la roqueña resistencia de la italiana Angelica Moresco, en todo momento seria alternativa al triunfo final, obligadas a disputar un taquicárdico playoff de desempate en el hoyo 18 que acabó desnivelando a su favor la jugadora española. Galiano, a base de contundencia.
Entre las chicas, no fue Natalia Escuriola, líder al comienzo del día, sino Marta Sanz la española que adquirió el máximo protagonismo, estableciendo en ambos casos un duelo épico con la italiana Angelica Moresco y la eslovena Ana Belac, las jugadoras que tenían opciones reales de complicar la existencia de las españolas en una ronda final donde la emoción y la incertidumbre presidieron el desarrollo de los 18 hoyos.
Marta Sanz, a tiro de medalla al inicio del día, partiendo de la cuarta plaza a dos golpes del bronce, realizó la proeza, sustituyendo a Natalia Escuriola en el momento más oportuno, cuando la castellonense desfalleció por completo -tres bogeys consecutivos en los tres últimos hoyos- para perder incluso la medalla de bronce y concluir en cuarta posición.
La madrileña, por el contrario, sacó a relucir la raza que le caracteriza, superando con creces su único error del día, en el hoyo 2, para construir a partir de ese instante una vuelta sobresaliente que alcanzó su grado máximo entre los hoyos 14 y 17, cuatro birdies consecutivos que le catapultaron hasta la primera plaza, compartida con la italiana Angelica Moresco, a quien un discreto final -como en las rondas anteriores-, materializado con un bogey en el último hoyo, condujo a ambas a disputar un taquicárdico playoff.
Ese hoyo 18, ya en el desempate, ejerció de talismán para la española y de socavón para la italiana, a quien una vez a lo largo de la semana se le atragantó visiblemente. A distancias similares del hoyo en el instante cumbre, un putt comprometido errado por Angelina Moresco dio paso a otro putt igualmente comprometido, pero acertado, por parte de Marta Sanz, una templanza y acierto que le valieron el oro.
Por último, Patricia Sanz concluyó su participación en la octava plaza tras una jornada repleta de altibajos, lastrada por dos dobles bogeys y dos bogeys en la recta final del recorrido que minimizaron el efecto positivo de cinco birdies.
En categoría masculina, Mario Galiano ratificó su supremacía en los últimos 18 hoyos de intensa competición, con una renta al inicio del día de 9 golpes con respecto al francés Nicolas Valentin Platret y el esloveno Zan Luka Stirn, rivales que sin embargo no fueron finalmente quienes inquietaron de lejos al golfista español, sino el italiano Aron Zemmer, a quien un 67 final le valió la medalla de plata.
Mario Galiano, a lo suyo, ratificó su triunfo con otra vuelta convincente de 69 golpes en un torneo donde los tres golfistas extranjeros citados ejercieron de parapeto a otras posibles medallas por parte de Álvaro Velasco e Iván Cantero, que desde los puestos 4 y 7 intentaron en vano alcanzar el podio. Sus respectivas propuestas, ambas de 74 golpes, resultaron insuficientes para acabar quinto y séptimo clasificado.