Lidón Muñoz, Mireia Belmonte, Marina García y Duane da Rocha logran la plata en sus finales y el 4×200 un bronce
Una decena de medallas acumuló España al medallero en la primera jornada de los Juegos Mediterráneos desde la piscina. Y Catalina Corró y Jéssica Vall, además, metieron preseas de oro en el zurrón nacional en una jornada de mucho brillo en oro, plata y bronce para la delegación nacional en natación. La castellonense Lidón Muñoz, Mireia Belmonte, Marina García y Duane da Rocha firmaron platas en sus respectivas finales, mientras el relevo femenino (4×200) subió al tercer cajón del podio.
En hombres, Joan Ballester y Hugo González fueron segundos en sus carreras por las medallas, y Álex Castejón, bronce.
Jéssica Vall y Marina García mandaron en la final de los 200 braza con una excelente carrera, cuya victoria se dirimió entre las dos españolas, siendo Vall la que sacó esa punta más de velocidad para remontar para colgarse el oro con un tiempo de 2.25.22, mientras Marina se quedó con la plata con un registro de 2.25.39.
Catalina Corró brilló en los 400 estilos. La nadadora, perfectamente recuperada de una operación por un tumor hace un año, demostró su capacidad y su gran punto de presente y futuro para la alta competición, rugiendo en el agua hacia el oro en la final de los 400 estilos. Mireia Belmonte, en esta misma prueba, no pudo encontrarse, si bien logró la plata antes en los 800 libre.
En plata también se bañó la castellonense Lidón Muñoz, que viene realizando un año espectacular y en clara línea ascendente, en lo que parece la explosión ya definitiva que, quizás, le lleve a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Por lo pronto, en Tarragona, este sábado hizo plata en los 100 libre con un tiempo de 55.28, mientras en el 50 espalda la misma suerte corrió Duane da Rocha con un registro de 28.57. La propio Lidón Muñoz formó parte del cuarteto del relevo en 4×200 junto a Melani Costa, África Zamorano y Marta Cano, quien sustituyó a Belmonte que renunció a la prueba, que se llevó el bronce.