JUEGOS OLÍMPICOS DE TOKIO 2020 | ATLETISMO
RFEA: En heptatlón, no fue el mejor final para la plusmarquista nacional María Vicente. Llegaba a los 800m, última prueba tocada por su ‘resbalón’ en la jabalina donde se dejó muchos puntos esfumándose un casi seguro récord de España y además bajando muchas plazas en la clasificación. Aún así, la discípula de Ramón Cid salió con arrojo a la pista decidida a completar también su debut olímpico realizando una gran carrera, en tierra de nadie finalizando en 2:16.99 (su segunda mejor marca en esta prueba a 70 centésimas de su mejor marca) totalizando finalmente 6.117 (su tercera mejor marca) y 18ª plaza.
En la matinal, María Vicente tuvo su jornada más aciaga, lejos de sus marcas en longitud y jabalina y alejándose del top10 final. Comenzaba la jornada duodécima, con la esperanza de realizar una buena longitud, una de sus pruebas estrella, que le mantuviese por encima de su récord de España. Sin embargo, no logró enganchar un salto largo. Se dejó varios centímetros en la tabla en los dos primeros saltos, con 6.18 (905 puntos) y 6.06, lejos de los 6.41 que tiene como mejor marca dentro de un heptatlón. El tercero fue nulo, pero María se mantenía en décima posición, dos puntos por encima del récord de España.
Sin embargo, la jabalina fue su prueba negra en Tokyo 2020. En los dos primeros lanzamientos, a la catalana le falló el gesto técnico y no logró hacer volar la jabalina, que casi en vertical, caía sobre los 30 metros. 30.77 el primero, nulo en el segundo, a María se le caían las lágrimas viendo cómo se le escapaba la competición. El tercer lanzamiento fue de 37.04 (611 puntos), diez metros por debajo de su mejor marca en un heptatlón, que le hacían caer hasta la decimoséptima posición en la general, antes de afrontar esta tarde el último 800 m.
Foto: COE