La espaldista valenciana, olímpica en Pekín 2008, campeona de Europa de 50 en 2012 y medallista mundial, dice adiós con una emotiva, pero feliz carta abierta
Es el adiós de una dama de la natación española. A sus espaldas, su especialidad en la piscina, 24 años de puro y honesto idilio con su deporte. Merche Peris Minguet (Valencia, 5/1/1985) nunca renunció a sus sueños en eso de abrazar fuerte el agua y hacer metros veloz y convertirse de bien joven en una pura sangre de la natación. Y aquellos sueños se tradujeron en realidades e incluso, como ella misma asegura, ha vivido experiencias que nunca imaginó cuando desde los 14 años, momento en los que disputó su primer Europeo absoluto, ya se veía que era puro talento; desde antes incluso. Y entonces tuvo que salir de casa y forjarse en Tenerife, en Barcelona y Madrid. Y en ese recorrido, trufado de éxitos, siempre subraya su participación en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008. Cuando lo logró, cuando hizo la mínima, llorando de alegría, escrutando la grada por donde estaba su familia lanzó un «ya está papis, lo hemos conseguido, estamos en los Juegos».
Para quien ha tenido la oportunidad de conversar tranquilamente con Merche sabe que es todo corazón y pasión, porque habla con todo el cuerpo, aunque siempre dice mucho su mirada. Y la natación, precisamente, le cruzó el camino con Alan Cabello, otro súper clase del agua, con quien ya se casó hace un año y siguen su recorrido hacia nuevas experiencias, si bien ambos tienen mucho que contar.
Esta es la carta íntegra de Merche Peris:
«Y llego el día, digo adiós a la natación, digo adiós a toda una vida en el agua.
Miro hacia atrás y recuerdo lo que he podido vivir y me recorre una sensación de orgullo y felicidad.
Eso es lo que me sucede ahora, cuando escribo estas líneas despidiéndome de la natación y del agua tras 24 años, aunque en ningún caso me desapego del que ha sido, es y será mi mundo.
La verdad es que la felicidad que siento gracias a las personas que han formado parte de este camino es mayor que la que siento por lo conseguido.
Quería dar las gracias en primer lugar, a mi familia, por todo lo que han hecho por mí, por los valores que me han dado y que me han ayudado a ser quien soy hoy, y a la vez pedir perdón por lo que mi dedicación a la natación les haya podido robar de mi, pues todo camino tiene momentos de todo tipo.
Gracias a ti, mi Alan, porque hemos vivido tanto cosas buenísimas como no tan buenas, pero siempre hemos estado juntos y eso no nos lo quitará nadie. Sin ti no hubiera podido y juntos seguimos un camino en el que nos queda muchísimo por vivir y compartir.
Gracias a todos mis amig@s y compañeros de entrenamiento y de club, a todos los que me seguís, porque gracias a vosotros nunca he nadado sola; siempre he notado una abrumadora fuerza y un gran apoyo cada vez que me tiraba al agua a competir y jamás voy a olvidarlo. Mis éxitos han sido también los vuestros.
Gracias también a los entrenadores y entrenadoras que han sido parte y acompañantes en diferentes etapas de mi vida. Agradezco tanto las situaciones buenas como las no tan buenas, o malas, porque me han hecho más fuerte no sólo para la piscina, sino para la vida.
¿Es este adiós un momento triste? No estoy triste, ni puedo estarlo. Estoy feliz porque conseguí muchos de mis sueños y otros que ni me llegué a imaginar nunca. Me siento muy afortunada y orgullosa de haber representado a mi país en tantas ocasiones. Lo echaré de menos siempre.
Ahora intentaré ayudar y apoyar a los que empiezan en el deporte y en la natación, porque sé lo importante que es tener ayuda y gente al lado cuando empiezas tu camino. Mi experiencia es vuestra. Todo lo que tengo dentro y lo que la natación y la vida me han dado como aprendizaje, quiero transmitirlo.
Para lo que necesitéis, aquí estaré.
Sólo quiero añadir un gracias infinito»
Brillante hoja de servicios
Merche, olímpica en Pekín 2008 y que quedó a siete centésimas de Londres 2012, tiene en su zurrón el bronce mundial en 50 espalda de Dubai 2010, además de ser finalista en 100 espalda en Dubai, Shanghai (2011) y Barcelona (2013); la espaldista fue campeona de Europa en 50 en Debrecen (2012), bronce en Budapest (2010), compitiendo en otras seis finales más. Peris suma una treintena de medallas de oro en los campeonatos de España en la suma de invierno y verano, además de un sinfín de platas y bronces nacionales Así lo hizo igualmente en los campeonatos del pasado invierno. La esencia, en todo caso, es que es brillante como persona.
«Digo adiós a la piscina, pero estoy más que feliz por todo lo que he vivido. Me siento muy afortunada y súper contenta. Es el momento y reitero en que me siento afortunada por el apoyo de la gente, de mis amigo y, sobre todo, de mi familia», comentó Peris en declaraciones a Visibilitas.