La selección española de piragüismo inauguró este sábado el medallero en la II Copa del Mundo de Esprint 2019 de Duisburgo con los metales de plata logrados por la gallega Teresa Portela y el balear Sete Benavides en la penúltima jornada de la competición.
Portela se proclamó subcampeona de la Copa del Mundo en K1 200, rozando la medalla de oro, con una exhibición primero en la semifinal y apenas una hora más tarde en la final. Con este puesto la pontevedresa se asegura su participación en el Campeonato del Mundo, que tendrá lugar en Szeged (Hungría) el próximo mes de agosto, donde buscará la clasificación para Tokio 2020, los que serían sus sextos Juegos Olímpicos.
Benavides, en C1 200, retornó al podio de una competición internacional en el campo de regatas de Duisburgo, en el que acumula seis medallas en cinco participaciones. El mallorquín estuvo en puestos de podio durante toda la prueba, en la que también ha competido su compañero de club el joven Antoni Segura, que terminó séptimo, y con el que juntos palearán el C2 200 esta tarde.
Las cinco embarcaciones que lograron el pase a final A son el K2 1.000 de los subcampeones mudiales Paco Cubelos e Iñigo Peña; el K2 200 de Alicia Heredia y Aida Bauzá; el C2 1.000 de Sergio Vallejo y Adrián Sieiro; el C2 200 de Sete Benavides y Toni Segura; y el C2 500 de Patricia Coco y Antía Jácome.
El K4 500 femenino, integrado por Sara Ouzande, Natalia García, Isabel Contreras y Begoña Lazkano, fue cuarto en el debut de esta nueva tripulación a la que se incorpora la gallega Natalia García y pasó a semifinal al igual que el andaluz Gonzalo Martín, sexto en la eliminatoria de C1 500.