Salvo Southampton que ha tenido el privilegio de acoger esta regata durante siete ediciones, Alicante es el verdadero puerto de salida de la vuelta al mundo a vela, sumando con esta cinco ediciones consecutivas
OPINIÓN
Tras cinco años desde que la flota de la Volvo Ocean Race dejara por última vez el puerto de Alicante, ya se calientan motores para organizar lo que será la decimocuarta edición de la vuelta al mundo a vela, ahora llamada The Ocean Race.
Una edición que inaugurará un nuevo ciclo, rompiendo los moldes de lo que hasta ahora estábamos acostumbrados. Para empezar, será la primera ocasión en la que hayan transcurrido tantos años entre una edición y otra, desde sus comienzos en 1973 cuando era la «Whitbread Round the World Race» y el mexicano Ramón Carlin, junto con su tripulación se alzaran con el título.
Con su última edición en 2017-2018, en la que ganó el Dongfeng patroneado por
el francés Charles Caudrelier, Volvo ha dejado de ser «naming», saliendo del organigrama directivo de esta regata oceánica y cediendo el protagonismo a sus nuevos propietarios, la sociedad The Ocean Race 1973 liderada por Brisius Richard.
También será la sexta vez que la regata salga desde España y la primera en que salga y llegue al Mediterráneo. Una de las apuestas más arriesgadas al poder descafeinar dos de los momentos más decisivos de una vuelta al mundo, si el Mare Nostrum se muestra como una balsa de aceite, sobre todo durante el mes de enero en Alicante. Otros datos interesantes son que será la primera vez que se haga con un barco con foils y que por segunda vez convivirán en la regata dos clases (Imoca 60 y VO65) tras hacerlo en la edición del 93-94 con los maxi y los Whitbread 60 (W60), donde España participó con el Galicia 93 Pescanova de Javier de la Gándara, Roberto «Chuny» Bermudez, uno de los grandes activos oceánicos de nuestro país desde entonces, y Jaime Arbones, entre otros grandes regatistas de nuestro país.
Volviendo al presente, tras cuatro ediciones en Alicante sería magnífico ver una regata más unida con la ciudad, donde los alicantinos sintieran la regata como suya y no como un evento que se celebra en el puerto y que visitan como el que pasa una tarde en el centro comercial. Sería fantástico lograr que se convirtieran en los embajadores de The Ocean Race, que junto con la America’s Cup y la Vendee Globe es el evento náutico relacionado con la vela más importante del mundo.
Salvo Southampton que ha tenido el privilegio de acoger esta regata durante siete ediciones, Alicante es el verdadero puerto de salida de la vuelta al mundo a vela, sumando con esta cinco ediciones consecutivas.
Alicante ya ha puesto la maquinaria en marcha sacando a licitación los primeros concursos públicos. Se atesora experiencia y se respiran aires nuevos. Es el momento de conseguir esos objetivos marcados para ediciones anteriores.