La pareja española de voley playa femenino pierde ante Birlova y Ukolova 2-0 (23-21, 24-22) en un partido durísimo
Siempre se dejan la piel Liliana Fernández y Elsa Baquerizo sobre la arena. En todos los partidos se vacían. Se trabajan las victorias y venden caras las derrotas. Y combativas se proyectaron en los octavos de final de voley playa de los Juegos Olímpicos de Río. Pero les tocó la cruz. Derrota y fin del camino en la arena de Copacabana. Duelos de esos intensos, competidos, largos, y que, por lo general, quedan resueltos de un lado u otro por detalles. Les cerró el paso la fría pareja rusa formada por Ekaterina Birlova y Evgenia Ukolova por 2-0 (23-21, 24-22).
Dolió a las españolas. Claro. Un crecimiento espectacular que ya les llevó a Londres 2012, donde acabaron novenas, y un progreso rotundo para afianzarse en el top ten mundial para llegar a Río de Janeiro. Había sueños posibles. Capacitadas para luchar por las medallas. Y por lo pronto resolvieron la fase de grupos limpia: tres victorias y todos los sets ganados, incluido el dificilísimo duelo ante las locales Bárbara y Agatha en un partido trepidante bajo la lluvia.
El cruce les ligó en octavos con Rusia, con Ekaterina Birlova y Evgenia Ukolova. Y Lili y Elsa salieron potentes, llevando la iniciativa, sonriendo siempre y con buenas sensaciones. Elsa defendiendo de dulce. Lili con unos bloqueos solventes. Y ambas con golpeos certeros. Pero de fondo, frías y casi sin hacer ruido, las rusas no se despegaron en el marcador. Rentas cortas para las españolas.
Y Rusia acabó alcanzándolas y empatando. La alternancia, sin embargo, apareciendo esos errores en detalles de juego, permitió a Birlova y Ukolova ponerse por delante. A remolque fueron Lili y Elsa a lo largo de algunos puntos, manteniendo el resultado ajustado, salvo un momentáneo avance de más tres de las rusas. Ningún equipo estuvo dispuesto a ceder lo más mínimo. Obvio, en juego estaba el pase a cuartos. Al final, el primer set se lo adjudicaron las rusas por 23-21 en 23 minutos. Pese a mostrarse como bloques de hielo, les costó mucho apuntarse el set.
Equipo de «currantas»
Birlova y Ukolova reanudaron el partido sumando los primeros puntos. Ventajas, sin embargo, sin conseguir abrir brecha respecto a las españolas. Parciales de más tres, pero sujetados por la madrileña y la benidormense. Éstas entraron mediado el segundo set en una fase de errores en el servicio, que permitió a las rusas una diferencia de más tres (14-11). Tiempo técnico en el que Lili y Elsa intentaron centrarse. Más frías. Más tensas en el juego en sí. Quizás la preocupación por verse fuera les restó en medio del juego.
Con el carácter que les caracteriza, que nunca perdieron durante el partido, Lili y Elsa remaron en la arena para evitar que Birlova y Ukolova se escapasen. Tres puntos consecutivos de Elsa Baquerizo, dos en golpeos de ataque y uno desde el servicio, situaron el marcador con un 18-19. Respiraban. Y en los tanteos siguientes 19-20 y 21-22, estando por delante. De la bola de set y partido al remonte de las rusas que acabaron ganando 24-22 en 27 minutos. Rusia se medirá en cuartos precisamente a las brasileñas Ágatha Bednarczuk y Bárbara Seixas, que apuntan, salvo sorpresa, a medalla.
«Hemos jugado mucho más constantes en estos Juegos que en los de Londres. A pesar de quedar en el mismo lugar, creo que tenemos que irnos mucho más contentas ahora», aseguró Elsa tras el partido, al tiempo que comentó que «creo que los hemos disfrutado mucho más, a pesar de este último partido, que ha sido ajustadito. A pesar de estar un poco más presionadas, ha sido más justito y… nada. Qué le vamos a hacer si sólo hay tres medallas».
Ahí acabó el camino de Liliana Fernández y Elsa Baquerizo en los Juegos Olímpicos de Río. Sin duda una dupla de esas que se muestran «currantes» y competitivas siempre y que todavía no tienen techo, a las que prepara Daniel Rodríguez Wood. Acaba Río para ellas. Ahora se ve algo lejano, pero como a menudo sucede, el tiempo pasa volando: ¿Tokio?
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