La keniata se cuelga el oro en Río, donde Azucena Díaz firma una buena carrera y Alessandra Aguilar y Estela Navascúes abandonaron
La keniata Jemina Jelagat Sumsong se coronó con el oro olímpico en Río en la prueba de maratón femenino. Completo la distancia en 2h24:04 y la española Azucena Díaz pasó por meta 10:58 después, acabando en un meritorio puesto 34 (2h35:02). Por su parte, las otras dos representantes españolas en la carrera, Alessandra Aguilar y Estela Navascúes, tuvieron que abandonar por diferentes problemas físicos.
La madrileña Azucena Díaz, que figuraba como reserva para la prueba de Maratón para los Juegos Olímpicos, sustituyó a la cántabra Paula González para la prueba de Río de Janeiro. González sufrió una fractura de estrés en el sacro en la parte interna del hueso. De modo que la Díaz completó el equipo olímpico femenino de maratón junto a Alessandra Aguilar y Estela Navascués.
La atleta madrileña completó el medio maratón en 1h17:07, pasando en el puesto 67. Ese tramo, en cuanto a la representación española, lo pasó primero Alessandra Aguilar en la posición 27 con un tiempo de 1h15:16. Le siguió Díaz y la tercera fue Estela Navascúes con un registro de 1h19:09 en la plaza 88.
Azucena comenzó a remontar posiciones y al paso de los 30 kilómetros había ascendido hasta el puesto 51. El problema fue que ya no completó ese paso Aguilar. Hizo el kilómetro 25 ocupando un 36, pero ya no llegó a los 30 kilómetros. Estela Navascúes abandonó por un golpe de calor en el kilómetro 23.
Horas más tarde, ya recuperada físicamente, Alessandra Aguilar explicó en su cuenta de Twitter respecto a lo que le sucedió en carrera que «ha tocado vivir la cara más amarga. Perdí el conocimiento y me desplomé. No lo vi venir. 27 kilómetros de disfrute y de repente todo negro. No lo entiendo»
Azucena, la única representante española que quedaba en carrera, mantuvo un buen ritmo y siguió su particular remontada. Hizo el paso del kolímetro 35 (2h08:12) en la posición 36. Rebasó dos puestos más en el paso del 40, cerrando definitivamente el maratón con un meritorio puesto 34 y cubriendo la distancia en 2h35:02.
Oro histórico para Kenia
Sumsong, con un ataque a dos kilómetros de meta, concretó su triunfo, que al tiempo significó la primera medalla de oro en un maratón olímpico femenino para Kenia. Sumsong secó con ese empujón final a la bahrainí Eunice Kirwa, de origen keniata, que acabó siendo plata, mientras la etíope Mare Dibaba, campeona mundial, llegó tercera.
Sumsong, de 31 años, ganadora este año en Londres, venció con un tiempo de 2h24:04, nueve segundos por delante de Kirwa, que sufrió su primera derrota del año. Dibaba, que confiaba en igualar a la portuguesa Rosa Mota como poseedora de los títulos mundial y olímpico, cedió en los dos últimos kilómetros y llegó a meta 26 segundos después que la vencedora.
La película de la carrera
La carrera, con 157 atletas alineadas bajo el arco de salida, comenzó a las 9,30 en el Sambódromo con 21 grados, una temperatura alta para un maratón aunque aceptable, pero agravada con un 83 por ciento de humedad, sobre un circuito batido por el sol a lo largo de un recorrido con sitios emblemáticos como la iglesia de la Candelaria o el Museo del Mañana.
Kenianas y etíopes tomaron la frontal del grupo delantero, que cubrió los 5 km en 17:23, y como en toda carrera de fondo, no faltaba representación estadounidense con Desiree Linden y Ahalane Franagan, que se codeaban con las africanas al paso por el 10 en 34:22.
El grupo cabecero se redujo a una docena cuando empezó a tirar la keniana Visiline Jepkesho. Por el 20 pasó el primer grupo, comandado por Jepkesho, en 1h09:07, con las africanas, las dos estadounidenses y la peruana Gladys Tejeda. El medio se pasó en 1h12:56.
Al paso por el ecuador de la carrera, la antigua marchadora bielorrusa Volha Mazuroniak, tocada con un pañuelo a la zíngara, se adelantó unos metros, pero kenianas, etíopes y estadounidenses, conocedoras de su marca personal (2h23:54) no la dejaron escapar. Se pusieron a rebufo.
Mazuroniak marcó el ritmo del grupo líder, que fue lastrando a corredoras. En el kilómetro 30 (1h43:21), la bielorrusa se quedó con la keniana Sumsong, las etíopes Tsegaye y Dibaba, las bahrainíes —kenianas de origen— Chelimo y Kirwa y la norteamericana Flanagan.
Kirwa, la más alta, aprovechó el paso por «el muro», los 35 km, para lanzar su apuesta con larga zancada. Su cambio sembró el pánico en el grupo delantero pero no descompuso a Dibaba, que se pegó a ella, y un minuto después llegó también Sumsong. Las tres, llamadas a subir al podio, se concedieron una tregua.
En busca del primer título olímpico de maratón femenino para Kenia, Sumsong hizo un amago a 3 km de meta y eliminó a la campeona mundial Dibaba. La medalla de oro, ya estaba claro, iba a ser para una chica nacida en Kenia. Quedaba por dilucidarse su nacionalidad. Sumsong persistió en su empeño y la bahrainí terminó por rendirse antes de afrontar el último mil.