Habrá medalla para España en el campeonato de Europa de bádminton por equipos. Ahora falta saber de qué material será el metal que se meterá en el zurrón el combinado femenino en el torneo que se disputa en Kazan (Rusia). Y será la primera vez que lo logre, pues el mejor precedente para el selección son los cuartos de final de Basilea de 2014. La medalla se aseguró este viernes después de que España eliminase a Ucrania por un global de 3-0 para meterse en las semifinales continentales, que se disputarán este sábado. El rival en la lucha por meterse en la final del Europeo será Bulgaria, selección esta última que ganó 2-3 a España en la primera jornada de la fase de grupos.
Que el combinado nacional dirigido por Ernesto García esté ya en el cuadro de medallas, a falta de que se determine el color de la misma, asegura la participación en el próximo Mundial femenino por equipos (Uber Cup), que se disputará del próximo 15 al 22 de mayo en Kunshan (China).
Como ya sucedió en las tres series de partidos de la fase de grupos, Carolina Marín jugó primero para España. La onubense, guerrera siempre, se midió a Maria Ulitina, que intentó tutear a la vigente campeona del mundo en el primer set, pero acabó siendo doblegada. Carolina se adjudicó por 21-18, ajustado por el arreón final pero sin profundidad de la ucraniana, el primer parcial de su partido. El siguiente set fue menos apurado para Marín que resolvió por 21-15, dando el primer punto de la jornada de cuartos a España.
Apareció luego en escena Beatriz Corrales. Le tocaba medirse a Voytsekh. Alternancia en el tanteo y respeto en los comienzos del primer set hasta que Corrales acabó por mandar definitivamente. Sin embargo, levantar ese primer parcial fue costoso. La ucraniana le hizo lucharlo a conciencia. De hecho, gozó de dos puntos de set, que Bea replicó para acabar ganando 23-21. La madrileña reanudó el duelo con mucha ambición y con la ventaja de ese primer set. Marcó distancias y aceleró para apuntarse el segundo parcial por 21-18 y obtener el segundo punto para la selección española.
La jovencísima Clara Azurmendi se encontró con el partido que podía meter al combinado de Ernesto García en las medallas. Se midió a Elena Prus para viajar definitivamente a las semifinales del Europeo. La ucraniana sostuvo a una gran Azurmendi en los primeros compases del primer set. Pero el ímpetu y el buen juego de la española fue incontestable para Prus, que cayó por 21-15 y 21-9. España cerró así el 3-0.