El conjunto ilicitano logra una nueva victoria ante el equipo canario (24-18) que le abre las puertas de la gran final continental por primera vez en su historia
BALONMANO – EHF EUROPEAN CUP
El AtticGo Elche está ya en la finalísima de la EHF European Cup por primera vez en su historia. El conjunto dirigido por Joaquín Rocamora, que ya se apuntó el duelo de ida ante el cuadro canario, volvió a llevarse la victoria en el definitivo partido de vuelta (24-18). No obstante, el partido contó con dos partes muy diferenciadas con una primera mitad claramente favorable a las ilicitanas y una segunda donde las canarias dieron un importante paso adelante lideradas por una estelar Lourdes Guerra bajo palos. Sin embargo, las locales terminaron tirando de oficio para llevarse una victoria que vale nada más y nada menos que una final europea.
Muy pronto, el equipo local desplegó un gran juego de ataque y de defensa difícil de contrarrestar. Como complicado de detener fue un partido más Danila So Delgado que, no sólo lideró a las suyas desde la anotación, sino también con decisivos movimientos en la parcela ofensiva para abrir huecos en la zaga canaria. En este cometido estuvo muy bien secundada en la primera mitad por Zaira Benítez o Tessa Van Zijl, entre las más destacadas.
Ese gran despliegue ofensivo no vino solo y es que, el cuadro ilicitano cuajó también un serio ejercicio defensivo que comandó bajo palos una Nicole Morales que fue gran protagonista para las suyas. La guardameta, junto a su defensa, cerró los espacios al cuadro canario que vio cómo se dificultaban todos sus caminos hacia el gol. Tanto fue así que habituales jugadoras importantes en la ofensiva canaria como Larissa Da Silva o Eider Poles, que se quedaron sólo con dos tantos cada una en su casillero al descanso, al que el Rocasa Gran Canaria se fue nueve goles abajo.
Tras la reanudación, el AtticGo Elche buscó más hacerse fuerte en defensa y el ataque posicional. En él se topó con grandes paradas por parte de la portera visitante, Lourdes Guerra. La guardameta lideró la esperanza de reacción canaria acumulando intervenciones salvadoras para las suyas, mientras la ofensiva del Rocasa Gran Canaria pareció también crecer por momentos para reducir las distancias en el marcador.
El cuadro visitante logró entonces su propósito de volver a aproximarse en el electrónico. Por entonces, Lourdes Guerra siguió haciendo de su meta un muro inexpugnable ni siquiera desde la suerte de los siete metros. Cada lanzamiento hacia sus dominios recibía la misma respuesta: paradón de la guardameta. Este hecho pareció afectar en lo anímico a un AtticGo Elche que había pasado de la clarividencia ofensiva en la primera parte a no encontrar la fórmula para sorprender a la zaga y a la inspiradísima meta visitante.
Finalmente, el conjunto ilicitano se sobrepuso a una difícil segunda parte para sus intereses, sobre todo, desde el aspecto ofensivo y rompió ese muro visitante con un tanto liberador que hizo el duelo de lo más atractivo hasta el final, pues ambos equipos se volcaron para acabar llevándose el partido, algo que terminó logrando el AtticGo Elche definitivamente para acceder a una histórica primera final europea. Un hito en el que se quedó a las puertas un Rocasa Gran Canaria que luchó hasta el final para junto al conjunto ilicitano dejar el balonmano femenino español en lo más alto en Europa.