La lateral izquierdo de la selección española de balonmano reflexiona sobre la clasificación para Río y los objetivos olímpicos en una entrevista en WSL
Cuando empezó con el balonmano a los once años, llegando desde la gimnasia deportiva —también del tenis—, confiesa que corría de puntillas, saltaba y levantaba la pierna por la inercia de su anterior disciplina deportiva. Lara González Ortega (SantaPola, Alicante, 22/2/1992) comenzó en parte porque le gustaba aquello a lo que ya veía jugar a su hermana. Cuatro años en el equipo de su pueblo y camino de los 16 años la descubrió Jose Aldeguer para llevarla al Elche y al tiempo abrirle las puertas de la máxima categoría nacional. Brilló y se fue al Metz francés. Tres buenas campañas y viajó a Hungría. Ya desde su periplo por las pistas galas la reclutó Jorge Dueñas para la selección absoluta allá por 2013. Desde entonces un crecer y un afianzarse entre las Guerreras para alcanzar ahora el sueño que de bien pequeña tuvo viendo gimnasia rítmica por la televisión: ir a unos Juegos Olímpicos.
La lateral izquierdo santapolera debutará en Río en una cita olímpica. Jugadora de equipo, refrenda en una entrevista para este portal el trabajo de fondo que hay detrás de una clasificación para unos Juegos: «Es difícil clasificarse. Hay gente que antes de que nos clasificáramos o de saber si estaba en la lista o no, me decía: ‘Suerte para los Juegos y si no vas a estos ya irás a los siguientes’. Pero es muy difícil poder llegar a cada edición. No se puede dejar pasar la oportunidad. Se tienen que dar muchos factores. Son cuatro años que si tienes buenos resultados puedes tener las cosas quizás más fáciles para una clasificación, para un Preolímpico. O puede pasar como a nosotras, que entre haber hecho un buen campeonato de Europa y por medio que Noruega fuese campeona de Europa y del mundo, clasificarte. Pero el camino es largo y difícil».
Lara, que tuvo a Macarena Aguilar como compañera en el Siofok húngaro la pasada temporada, explica que «este año fue todo pensando en ir a Río. En Siofok, con Maca, íbamos al gimnasio hasta los domingos post partido pensando en estar lo mejor posible. Y con lo que hemos pasado allí, lo que nos mantenía la motivación era pensar en Río».
La primera línea de la selección refrenda la importancia de que las Guerreras lograsen la clasificación, al tiempo que lamenta que el combinado masculino no lo lograra. «A nivel de colectivo es súper importante que la selección española femenina de balonmano esté en Río. Pero es un palo muy grande que los chicos no se hayan clasificado después del ciclo olímpico. Es injusto. Se han estado metiendo en semifinales en los últimos cuatro años. Es un palo muy grande para el balonmano en general. Bueno, nosotras estamos y es importante que el balonmano español tenga presencia en los Juegos», asegura.
«El sueño se ha cumplido y quiero competir y disfrutarlo al máximo»
A título individual, comenta que estar en unos Juegos «es un sueño cumplido. Desde pequeña si con algo sueñas es con ir a unos Juegos. Y más aún cuando eres deportista profesional. Recuerdo que veía la gimnasia rítmica en la tele en los Juegos y pensaba que tenía que ser una experiencia increíble y el conseguir ir lo deseaba con todas mis fuerzas. El sueño se ha cumplido y quiero competir y disfrutarlo al máximo».
No ha sido una temporada fácil para Lara. En la primera parte del curso, sufrió una lesión de rodilla que presumiblemente la dejaba fuera del Mundial y dudó, en un primer momento, incluso de los Juegos: «Ha sido un año difícil, duro, en el que hubo un cambio de equipo, a otra liga —la húngara—, un cambio de idioma, y luego la lesión por medio. Fue un palo la lesión, pero al final las cosas salieron bien. Trabajé mucho para recuperarme lo mejor posible. Pero la recuperación fue bastante más rápida de lo esperado y se acortaron mucho los plazos. Cuando me lesioné no llegaba al Mundial y pude acortar plazos e ir».
La santapolera se recuperó al ciento por ciento ya hace meses. Lo dicho, disputó incluso el Mundial. Llega en buenísimas condiciones a Río. Y asegura respecto a cómo llega el equipo que lo hace en «muy buenas condiciones y mentalmente fuerte. Además, el bloque se mantiene durante muchos años. Somos algunas que nos hemos ido incorporando, pero Jorge ha mantenido el bloque principal y ese bloque ya estuvo en Londres, consiguiendo la medalla de bronce».
«Si el máximo es el 100 hay que dar el 200. Hay que dar siempre un poco más de ti»
Marta Mangué alcanza sus terceros Juegos. Gran parte del grupo llega a los segundos. Y algunas, como Lara, debutan. Para las «nuevas» en lo olímpico, las más experimentadas trasladan «la importancia de lo que son unos Juegos, el hecho de ir a por todas, el darlo todo por subir al podium, porque obviamente no se quiere menos. Nos han venido diciendo que es algo muy bonito, que es algo que hay que vivirlo y que hay que darlo todo. Si el máximo es el 100 hay que dar el 200. Hay que dar siempre un poco más de ti».
Subraya Lara que España llega fuerte física y mentalmente. Pero reconoce que «ahora mismo las selecciones están muy igualadas. Puedes ganar y perder contra prácticamente todas. El grupo nuestro es difícil y hay que estar a tope y convencidas de que podemos ganar todos los partidos».
Analiza el grupo en el que arrancan en Río el camino hacia el podio y explica que «aunque suene a tópico, hay que pensar en cada partido. Es un grupo difícil. Noruega, que es campeona olímpica, de Europa y Mundial, es la gran Noruega. Aunque les hemos plantado cara. Brasil, la anfitriona, es una gran selección y además juega en casa. Montenegro son muy guerreas y fuertes. Y Rumanía, en las últimas competiciones ha estado a un gran nivel. Angola a priori sería el equipo más asequible, pero luego hay que jugar. En unos Juegos no te puedes relajar un sólo segundo».
«Yo quiero aportar el máximo de mí y aportar mi granito de arena para el común del equipo»
La premisa es evidente. Hacer una gran fase de grupos y lograr buen plaza para las eliminatorias. Brasil eligió como anfitriona estar en el grupo de Noruega y España. Quizás para todas esas selecciones mejor es cruzarse en el cuadro que en las eliminatorias.
Lo mejor será desde este próximo fin de semana comenzar a hablar en la pista. Y ese ir partido a partido. Aunque la competición es rápida y los objetivos siempre se tienen. Al menos igualar lo hecho en Londres, donde se subió al escalón de bronce. «Nuestro pensamiento es el de ir a por todas. Volver a subirse al podio y siempre se tiene en la cabeza eso de superarse. Si se logró la medalla de bronce en Londres, qué menos que intentar igualarlo ahora. Darlo todo, llegar con la mejor mentalidad y exprimir cada partido».
Lara, con un rol claramente defensivo intentando frenar todo lo que se acerque hacia la portería española, con la confianza de Dueñas, tiene su propio sueño: «Subir al podio en los Juegos. Lo veo viable. Yo quiero aportar el máximo de mí y aportar mi granito de arena para el común del equipo». Ese granito se sumará a los de Silvia Navarro, Eli Chávez, Marta Mangué, Nerea Pena, Macarena Aguilar, Eli Pinedo, Carmen Martín, Shandy Barbosa, Nely Carla Alberto, Patri Elorza, Naiara Egozkue, Marta López y Darly Zoqbi.