La lista de compensación incluida en el convenio colectivo de las jugadoras de la Primera Iberdrola de fútbol sigue siendo motivo de controversia. Algunas de las futbolistas afectadas por el artículo 20 del convenio colectivo, como son los casos de la levantinista Ona Batlle o de Maite Oroz y Damaris Egurrola, ambas del Athletic Club, además de un importante número de jugadoras en solidaridad con ellas, trasladaron su rechazo ante que consideran «una cláusula abusiva e injustificada».
Mediante un comunicado difundido en sus redes sociales, una numerosa representación de futbolistas de la Primera Iberdrola denunció a lo largo del fin de semana «una situación muy desagradable que están viviendo algunas jugadoras», por la inclusión el pasado mes de marzo en el convenio colectivo de una lista de compensación que afecta a 17 jugadoras menores de 23 años de la máxima categoría del fútbol español. Por ellas sus clubes reclaman entre 10.000 y 500.000 euros, al término de sus respectivos contratos, en concepto de compensación siempre que su salida sea a otro club español.
«El caso es que nosotras estamos a favor de que existan unos derechos de formación, pero siempre que sean cantidades racionales y no desorbitadas. Cantidades como 500.000 euros o 250.000 euros imposibilitan que ningún club pueda fichar a las futbolistas con esta cláusula y lo único que consiguen es que se tengan que marchar al extranjero porque ahí no se aplica esta recompensación», indica el comunicado compartido por Maite Oroz, Damaris Egurrola u Ona Battle, incluidas en esta lista, pero también por Aitana Bonmatí, Sandra Paños o Nahikari García, entre otras, en solidaridad con las afectadas.
«El talento que se desarrolla en España hay que cuidarlo y tratar de disfrutarlo aquí porque eso significará que tenemos una mejor competición y un nivel más alto. Es por ello que queremos mostrar nuestra disconformidad y nuestro desacuerdo a dichas cantidades porque hoy afecta a más de una decena de futbolistas pero seguirá aumentando si no se resuelve la situación. Ahora mismo hay jugadoras que terminan contrato el 30 de junio, con las que no se había negociado esto en sus contratos, y que de golpe se encuentran ante una cláusula abusiva e injustificada que les va a impedir decidir su futuro libremente», denunciaron las futbolistas.
Para seguir «construyendo, creciendo y mejorando», las jugadoras reclaman «a las autoridades o entidades responsables que tomen cartas en el asunto y ayuden a resolver esta situación tan indeseada».