BALONCESTO | ENTREVISTA A LUISA BISETTI
Anna Junyer, Luisa Bisetti, Paloma Sánchez, Natalia Zasoulskaya, Razza Mujanovic, Rosa Castillo, Laura Grande, Esther Tordesillas, Teresa Almoguera y Emma Bezós formaron el roster de Dorna Godella de la temporada 1991-1992. El 26 de marzo del 92, el equipo dirigido por Miki Vukovic, que lo ganó todo en la competición continental, puso la guinda completando con la conquista de la Copa de Europa. Y este 2022 se cumplieron tres décadas de aquella mágica corona. El club valenciano, esencial en la historia del baloncesto femenino español, doblegó al Dinamo de Kiev en Bari en la final de la Final Four. Luisa Bisetti (4/3/1971), jugadora de aquel histórico Dorna, repasa para Visibilitas.com aquella historia.
«Aquella época como de las mejores que viví siendo jugadora profesional. La primera final de Copa de Europa que llegamos y la ganamos. Durante toda la temporada no perdimos ni un solo partido: ni de liga, ni de Copa de la Reina, ni la propia Copa de Europa», valora Bisetti. Y recuerda aquella final contra el Dinamo de Kiev en Bari «con un sentimiento de auténtica adrenalina. Pendé que si habíamos sido capaces de ganar todos los partidos durante toda la temporada, porque no poner la guinda al pastel con una Copa de Europa».
Bisetti lo tiene claro: «El éxito de las jugadoras de aquella plantilla del Dorna era el gran compañerismo que teníamos entre todas. Nos llevábamos súper bien, hicimos una gran piña, y gracias a ello, y mucho trabajo, conseguimos tantos éxitos. La esencia era clara: ante todo éramos un gran grupo humano».
La que fuera jugadora de aquel Dorna Godella destaca sobre la figura de Miki Vukovic que fue «un grandísimo entrenador, aprendí muchísimo de él y me hizo crecer como persona y como jugadora. Miki era un ganador nato y eso lo transmitía a todo el equipo. Recuerdo una frase que nos dijo en Bari antes de la final: ‘De los equipos subcampeones no se acuerda nadie, solo se acuerdan de los campeones’. Era un ganador, un grandísimo entrenador, muy exigente, y una bellísima persona».
De su etapa con el Dorna, Luisa relata que a nivel personal «lo recuerdo con muchísimo cariño y una experiencia de vida increíble. Eso sí, lejos de tus amigos y familia, pero con una maleta llena de ilusiones que se completó sobradamente». En lo que al colectivo se refiere, valora que se llevó «grandísimas amistades, que después de 30 años continúo teniendo muy presente en mi vida. Fue una etapa que recuerdo de mucho trabajo y esfuerzo, pero a la vez con mucha alegría, emoción y mucha adrenalina».
Luisa pasó tres temporadas con Dorna, pero en la última tuvo una grave lesión de rotura de los ligamentos cruzados de la rodilla. En todo caso, su carrera en el baloncesto qué le dio: «El baloncesto me dio el trabajo en equipo, el que todas fuéramos a una y que con el trabajo de todas podíamos conseguir grandísimos logros. Sobretodo, se consigue si hay un gran equipo humano detrás, sin egoísmos y con todas a una. La cuestión es apoyarnos todas, trabajar duro todas y los logros llegan siempre cuando te esfuerzas al máximo».
En referencia al baloncesto en los tiempos actuales, Bisetti considera que hay «mucha más visibilidad en aspectos como las redes sociales. Hay mucha más información en todos los ámbitos y esto es siempre bueno para la proyección del baloncesto femenino».
Y traslada un mensaje para las generaciones que están siguiendo los éxitos de la selección o de los clubes en la actualidad y que son referentes para las jugadoras del futuro: «Les diría que disfruten jugando a baloncesto. Y que con esfuerzo y mucho trabajo las metas se pueden conseguir. No rendirse jamás en perseguir tu sueño. Cuando ya cuelgas las zapatillas, el baloncesto te enseña que el trabajo en equipo es siempre importante dentro y fuera de las canchas. Y eso te sirve para tu trabajo, tus amistades, tu día a día».
Valencia Basket recoge el testigo de aquella historia que ya alzaron Dorna Godella o Ros Casares: «Es un proyecto ambicioso, joven y con muchísima proyección y tienen a toda una ciudad con muchas ganas de seguirlas, animarlas y llevarlas a lo más alto. La conjunción de equipo más afición es increíble en la ciudad de Valencia».